Veintinco años. Esa es la cantidad de tiempo que paso el Conde de Montecristo, inmortal personal de Dumas, encerrado en el castillo de If, gracias a la traicion de uno de sus mejores amigos; sin embargo, a diferencia de él, nosotros disfrutamos cada uno de nuestros primeros veinticinco años dedicados a la venta de suministros industriales.
Los disfrutamos porque amamos lo que hacemos y, cada mañana, nos levantamos intentando ser mejores que el dia anterior, confiando en que, si ponemos suficiente esfuerzo y tezon, logramos mantener la calidad de nuestros productos en el nivel de excelencia que nos hemos impuesto desde nuestra fundación.
Los clientes han respondido a nuestro trabajo dandonos todo su apoyo, razon por la cual podemos decir que hemos cumplido largamente los dos objetivos que nos planteamos en nuestro comienzo: 1) ofrecer productos de maxima calidad al precio mas competitivo; 2) establecer relaciones con cada persona que nos visiten que vayan mas alla del comercio.
Hoy, dos decadas y media despues de nuestro comienzo, mas alla del inmenso exito obtenido, podemos decir que nos alegra haber triunfado pero, como en el poema de Eduardo Galeano, nuestro objetivo sigue estando mas alla del horizonte, y a medida que nos acercamos, él se aleja.
Muchos nos llamaran ilusos, pero nosotros creemos que cualquier empresa que trabaje en mejorar dia a dia, no es un soñador sino un perfeccionista dando todo por darle forma a su sueño.
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